Los comerciantes mendocinos se mostraron satisfechos con los resultados de la prueba piloto de atención en horario corrido -sin cierre durante la siesta- que se puso este viernes en marcha.
El nuevo horario en la atención del comercio es una iniciativa impulsada por el Ministerio de Economía, Infraestructura y Energía, a través del Instituto de Desarrollo Comercial (IDC), y por la Cámara Empresaria, Comercio, Industria, Turismo y Servicios de la Capital de Mendoza (Cecitys).
El plan denominado "Ciudad de Siesta" tiene por objetivo lograr la apertura de comercios durante las primeras horas de la tarde, de manera de ofrecer más opciones de compra a los consumidores.
Daniel Dimartino, gerente general del IDC, dijo que el resultado “fue muy bueno".
"En el centro los comerciantes están muy contentos, aunque es cierto que el domingo es el Día del Padre, por lo tanto el lunes veremos cómo responde la gente” sin el gancho que representa esa fecha, agregó el directivo.
“Ha sido bastante interesante, arrancamos con 160 comercios y ya estamos por los 200, de todos los rubros y en distintas calles, y esta prueba piloto se va a extender hasta el 31 de julio”, precisó.
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El consumidor que realice sus compras durante la siesta, de 13.30 a 16, se ahorra el costo de estacionamiento, ya que dicho cobro en ese lapso horario no se realiza, por lo que es una opción de ahorro", detalló Dimartino.
Al ser consultado sobre las criticas formuladas por la Federación de Empleados de Comercio al plan, Dimartino comentó que las partes mantuvieron "una audiencia en la Subsecretaría de Trabajo, en la cual acordamos que se iban a hacer inspecciones entre las dos entidades para que no haya ningún comercio que vulnere los derechos de los trabajadores”.
"Les ofrecimos a los comercios un programa del Ministerio de Trabajo de la Nación, que se llama ‘Primer empleo’, donde hay una base datos de chicos entre 18 y 24 años desempleados, para que trabajen cuatro horas diarias, por $ 3.900 , que se los paga la Nación y esos empleados reciben capacitación y un trabajo de cuatro horas por ese dinero -que el comerciante no paga- y es como una especie de pasantía que en principio es durante cuatro meses y se puede renovar por dos meses más”, dijo el funcionario.
De esta forma, los empleados continúan realizando sus horarios tradicionales, con el parate de la siesta, y los nuevos contratados cubren ese espacio sin costo extra para los comercios.
Fuente:Télam.
