Un estudio atenta contra una de las costumbres argentinas. El uso a largo plazo de combustible como madera o carbón para cocinar está asociado a un mayor riesgo de muerte por enfermedades cardiovasculares, afirma el informe.
El uso a largo plazo de combustibles sólidos para cocinar, como madera o carbón, está ligado con un mayor riesgo de muerte por enfermedades cardiovasculares. El estudio fue publicado el 26 de agosto por la Sociedad Europea de Cardiología.
En la investigación participaron 341.730 adultos chinos de entre 30 y 79 años entre 2004 y 2008. Fueron encuestados acerca de la frecuencia con la que cocinaban y el combustible que utilizaban.
Los investigadores estimaron la duración de la exposición al carbón o madera y achicaron el análisis a aquellos que los usaban al menos una vez a la semana en sus hogares y no tenían ninguna enfermedad cardiovascular.
El 22,5 % de los participantes utilizaron combustibles sólidos para cocinar durante más de 30 años. El 24,6 % entre 10 y 29 años y el 53 % durante menos de 10 años o nunca.
Durante el período de observación, 8.304 voluntarios murieron de una enfermedad cardiovascular. Además, cada década de exposición a la leña o carbón se asoció con un aumento del 3 % del riesgo de muerte cardiovascular.
Por lo tanto, los científicos recomendaron el uso de electricidad o gas para cocinar para reducir significativamente el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Es decir, que la costumbre argentina de comer asado debería reducirse si la frecuencia es alta.
Por Redacción.