Desde hace más de cinco días, los vecinos de esa populosa comunidad del Este padecen el calvario de vivir las fiestas navideñas sin agua potable. La respuesta a cada llamado a Aguas Mendocinas es infructuosa. Aducen la rotura de una bomba y el exceso de consumo sin la promesa de una pronta reparación.
Desde la comuna, reportan algunos vecinos, intentan llevar tranquilidad aunque realmente la situación se vuelve insostenible cuando se trata del recurso más importante para la vida de las personas en sociedad. "Tenía gente invitada a pasar la Navidad y mi casa fue un caos, ni siquiera teníamos agua para tirar el agua del inodoro, ni hablar de la "Pelopincho" que quedó de recuerdo en el fondo de la casa", comenta Félix, vecino de la Calle Democracia.
En el organismo encargado de la distribución del agua le echan la culpa a los vecinos por el excesivo consumo de agua. Por el otro lado, los afectados, no pide respuestas, sino que piden una urgente solución a las autoridades con la misma velocidad que Aguas Mendocinas se encarga de recaudar los pagos de servicios de los clientes todos los meses.
Por redacción
