El personaje fue recibido por el sumo pontífice durante la audiencia de este miércoles.
Un tipo diferente de participante se acercó hoy a la audiencia general del papa Francisco en el Vaticano: Spiderman.
Un hombre vestido con un traje completo, ajustado a la piel, rojo, negro y azul del personaje de cómic y película, incluida la tapa de la cabeza, se sentó en la sección VIP de la audiencia en el patio de San Damaso del Vaticano. Lo hizo en silencio junto a un sacerdote vestido de negro que parecía imperturbable por el colorido personaje en el asiento de al lado.
El hombre detrás de la máscara es Mattia Villardita, de 27 años, fundador de Superhéroes en la sala, una asociación de voluntarios que se disfrazan de famosos personajes de cómic para visitar a pequeños ingresados en hospitales.
Mattia visita y divierte a niños enfermos desde hace 4 años. Cuando se originó la cuarentena, no interrumpió su trabajo en ningún momento. Comenzó a realizar videollamadas para así poder comunicarse con los niños.
El joven confesó que se viste de Spiderman “para arrancar una sonrisa a los más pequeños que están en el hospital, lo hago porque tengo una enfermedad congénita y pasé 19 años entrando y saliendo del hospital Gaslini de Génova”. También agregó que mientras pasaba sus internaciones solo en el hospital, le hubiera gustado muchísimo ver al Hombre Araña entrar por la ventana de su habitación.
Al final de la audiencia, Villardita, fue presentado al Papa y le dio al pontífice una máscara de Spiderman. Francisco, por su parte, le regaló un rosario y le agradeció por la actividad solidaria que realiza con los niños.
Por redacción
