Para el Xeneize fallaron Sebastián Villa, Esteban Rolón y Carlos Izquierdoz. En los 180 minutos habían empatado 0 a 0. Tanto en Buenos Aires como en Brasil a Boca le anularon sendos goles polémicos por decisión del VAR.
Boca Juniors y Atlético Mineiro empataron 0 a 0 por el partido de vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores. A los dirigidos por Russo no le cobraron un gol revisado por el VAR, lo que generó un nuevo escándalo. Como se repitió el resultado del encuentro de ida, la serie se definió por penales donde Boca perdió 3-1.
Las realidades de ambos equipos, a niveles futbolísticos fue pareja y durante el primer tiempo el rose fue constante, ya que ambos equipos se dedicaron a pelear el partido más que a jugarlo. Mientras tanto, el árbitro uruguayo Esteban Ostojich, el mismo de la final de la Copa América entre Argentina y Brasil en el Maracaná, no mostró ni una tarjeta amarilla en ese período inicial.
El segundo tiempo siguió similar que el primero y el equipo de Russo aprovechó una pelota parada para anotar el 1 a 0 por intermedio de Weigandt, quien aprovechó un rebote del arquero. Pero, todo Mineiro protestó, fue así que el VAR llamó al árbitro, en medio de empujones y disputa entre los equipos, y el juez decidió anular el tanto por una polémica posición adelantada del Pulpo González. El encuentro terminó 0 a 0.
En los tiros desde los doce pasos, Hulk falló el primer remate y Marcos Rojo convirtió su gol. Mientras que, el argentino Nacho Fernández anotó para los brasileros y al colombiano Villa el arquero del Mineiro le atajó el penal. Todo estaba 1 a 1 con dos penales cada equipo. El portero Éverson marcó su tiro y Mineiro clasificó a cuartos de final. Se enfrentará al ganador del partido entre Argentinos Juniors y River Plate.
Por redacción.
