Hace algunos días se difundió un audio de Whatsapp en el que una mujer del Nordelta llama a su agente inmobiliario para plantearle su enojo por los vecinos de un selecto barrio privado de Tigre.
Las quejas de la mujer se volvieron viral hace un par de días, ya que expresa la molestia que le causan los modales y costumbre de sus cohabitantes.
El motivo explícito: la idea despectiva hacia el consumo del mate, la utilización de reposeras, la referencia a una playa de Mar del Plata y los perros ”con sus gritos".
En el mensaje, que dura alrededor de 5 minutos, la mujer que dice ser cirujana plástica, vivir en Palermo Chico y haber comprado el departamento en Tigre para su hija de 15 años, dice; "Te cuento Michelle, yo soy una cirujana, una mujer normal, pero tengo determinados códigos de estética visual y de estética moral. Te lo digo a vos porque me caíste genial, porque sos una divina".
Luego de esta declaración, llegan las quejas: "No me divierte estar en Nordelta , mirando el lago, viendo gente en una reposera de Mar del Plata en el muelle tomando mate. Para eso, no invertía 200 mil dólares y me quedaba en mi propio campo o me compraba una casa".
Pero cabe remarcar que expresó; "La gente no se ve mala, pero se ve que es gente que viene de barrios visualmente no muy buenos. Me molesta ver un grupo de gente que lleva al perro a la pileta como si estuviéramos en la Bristol de Mar del Plata", vuelve a repetir en el audio, en tono peyorativo sobre la popular playa bonaerense.
Después de sus quejas, llegó el pedido a la agente inmobiliaria: "Quiero descansar visualmente, me molesta que estas bestias, porque son bestias, no tienen educación, toman mate, tiran la yerba, estaban reunidos con el perro que gritaba cerca de la pileta. Una cosa de cuarta categoría, de la Bristol de Mar del Plata. Quiero decirte que no soy Máxima Zorraquieta, que es Zorreguieta, la reina de Holanda, soy una mina normal".
Lo raro es que la gente que no se ve mala según la cirujana pero comentó; "es de décima categoría, yo no sé si los departamentos salen súper regalados, yo lo pagué 200 mil dólares, vivo en Palermo Chico y el metro cuadrado está lo mismo. Yo creía que había otra onda más cool, relajada en el edificio. Tienen modales de décima categoría. Propuse poner un pase electrónico y dicen que sale muy caro. Son unos grasas. Creeme Michelle que yo no desprecio a la gente", cerró el extenso mensaje.
Las críticas y planteos de la mujer inmediatamente se volvieron tema de conversación en las redes sociales y tanto la palabra "Nordelta" como "Cheta de Nordelta" se volvieron tendencia en Twitter, donde la mayoría de los usuarios, incluyendo famosos, tomaron el asunto y la caricaturizaron. Inclusive realizaron una convocatoria a una "mateada masiva" frente al exclusivo barrio privado.
Por Redacción
