No se los ve todavía agolparse masivamente en los consulados; pero ya están comenzando a averiguar por turnos, requisitos y posibilidades.
Cada vez más mendocinos se plantean la posibilidad de mudarse a Europa. Agobiados por la inflación y la crisis, muchos ya han empezado a sondear la posibilidad.
Sin embargo, desde los consulados de Italia y España (aquellos con la mayor cantidad de mendocinos interesados en obtener el pasaporte o la ciudadanía, ya que la mayor ascendencia es de aquellos países) destacaron que lejos está la situación actual de la de los años 2000 y 2001, cuando se produjo un éxodo importante. Incluso, coincidieron en que no se evidencia de forma tan directa esta tendencia.
De hecho, resaltaron que la cantidad de consultas y los turnos que se atienden por estos días no difiere demasiado de la de otros momentos calmos.
Pero, en contraposición con este panorama, abogados y personal dedicado al asesoramiento para iniciar estos trámites sí resaltaron el creciente interés. “En 2017 y lo que va de 2018 se notó un llegada masiva de argentinos y venezolanos, los sudamericanos que más llegaron a Italia. La mayoría de ellos aprovechó la ascendencia de un bisabuelo italiano para iniciar el proceso”, destacó Sebastián Polliotto (36).
Nacido en Córdoba, vive en Roma desde hace cuatro años y con su emprendimiento “Mil Cosas Interesantes” se dedica a ayudar a argentinos a tramitar la ciudadanía italiana e iniciar el trámite en ese país. “Hacer el trámite desde acá puede tomar de tres a seis meses, frente a los seis años (mínimo) que toma hacerlo en Argentina”, destacó.
“La situación es distinta a lo que ocurrió en 2000 y 2001; no por la cantidad de gente, sino porque en aquella época la situación en Europa no estaba tan complicada. En esos años, los profesionales casi ni consultaban. Pero hoy hay desde chicos de 20 años (que están terminando sus estudios y no ven un futuro prometedor), hasta jubilados o empresarios que quieren otra oportunidad”, resumió Florencia Mobilia, quien asesora a mendocinos interesados como parte del mencionado emprendimiento.
De hecho, hizo notar que en Mendoza los contactan cerca de 100 personas al día, y entre 40 y 50 tienen avanzada la idea de iniciar la ciudadanía. “Un 80% de quienes se van lo hacen para probar suerte, sin tener un trabajo. Recomendamos que no se vayan sin la ciudadanía, porque están muy exigentes en Europa con el tema de migraciones”, destacó Mobilia, quien indicó que quienes toman esta decisión tienen, en su mayoría, entre 30 y 50 años.
En esa sintonía, Polliotto resaltó que la mayoría de las personas arman las carpetas con documentación en Argentina, y que viajan –con pasaje de ida y de vuelta, como turistas– a Italia. Y ya en aquel país inician el trámite. “Desde 2017 hay 100 personas a quienes hemos ayudado directamente a hacer el trámite. Mientras que, indirectamente, guiándolos por redes sociales, teléfonos o hasta con un libro online para que sepan cómo actuar, lo han hecho más de 500 personas”, sintetizó.