Por más que desde Argentina se han realizado innumerables pedidos, no hay cambios desde el país vecino y ya son más de 3 mil transportistas los que están a la espera en el paso fronterizo.
Este sábado se cumplieron ocho días de aquel paro de trabajadores de la aduana chilena, que devino en una modificación de los requisitos de ingreso a ese país por el paso terrestre Los Libertadores, la cual ha generado serias complicaciones en el lado argentino. A más de una semana de la decisión unilateral del gobierno trasandino -y pese a la intervención y pedidos de las autoridades argentinas- la situación en la frontera no ha sufrido alteraciones.
El tránsito habilitado de 8 a 14 para vehículos particulares y colectivos sólo para personas que retornan a sus países de origen (no para turistas), y las 24 horas para transporte de carga, pero con test de antígenos para el 100% de los choferes que pretendan cruzar al vecino país.
Ese requisito es el que ha generado malestar entre los camioneros y empresarios, ya que hay sólo cinco casillas de testeos habilitadas, por lo que se estima que por jornada logran atravesar la frontera entre 130 y 180 rodados (hasta el jueves, ya que desde el viernes los varados encabezan un corte de ruta), frente a los 900 que arriban al complejo a diario. A raíz de este escenario, son más de 3.000 los transportes que aguardan del lado argentino (entre el ACI Uspallata, la Destilería, paradores, estaciones de servicio y a la vera de las rutas 7 y 84) para ingresar a Chile.
La información fue confirmada por Daniel Gallart, presidente de Aprocam, quien sostuvo que "del lado argentino está prácticamente todo hecho: me consta que ha intervenido el Gobierno de Mendoza y la Cancillería Argentina, con reclamos formales y también a través de la vía política, pero el único que tiene la llave para destrabar el conflicto es Chile, que sigue sin reaccionar".
El dirigente reparó en las pérdidas millonarias que genera la decisión unilateral de la nación trasandina, que incluso podría provocar inconvenientes en la cadena de abastecimiento de aquel país. Por tal motivo, la cámara mantiene la recomendación a las empresas de suspender las cargas a Chile, hasta tanto se resuelva la situación. "La logística es compleja, porque tenemos camiones que partieron de Brasil y están en viaje, por eso siguen llegando", explicó.
Asimismo, destacó que tras el acuerdo con el Ejecutivo provincial, en la zona de la Destilería de Luján de Cuyo se aposta una ambulancia para asistir a los camioneros en caso de alguna urgencia sanitaria, y Aprocam provee botellas de agua para la hidratación.
En cuanto a la posibilidad de que los choferes que dieron positivo de Covid-19 en los controles fronterizos, sean repatriados a la Argentina para cumplir la cuarentena en el país, resaltó que siguen esperando la respuesta chilena. Por el momento, son aislados en una residencia sanitaria donde algunos de ellos sufren "maltrato humanitario".
Las restricciones en Chile comenzaron a regir la semana pasada luego de que el gremio aduanero planteara objeciones a los controles de ingreso, los cuales -según denunciaron- provocaron un brote de contagios de coronavirus entre su personal. Autoridades diplomáticas argentinas indicaron que el país trasandino incumple los convenios firmados en el marco del Acuerdo de Transporte Internacional Automotor (ATIT), que especifica que "toda medida que afecte al transporte Internacional terrestre, sea comunicada a los organismos nacionales competentes con la mayor antelación posible antes de su entrada en vigencia".
Fuente: Sitio Andino
