Daniel y Omar Garbarino, fundadores de la famosa casa de electrodomésticos que lleva su apellido, armaron un entramado de sociedades y fideicomisos ocultos en paraísos fiscales, mientras la empresa daba los primeros pasos hacia una crisis financiera que persiste hasta estos días.
Los hermanos y el entonces CEO de la compañía, Carlos Eduardo García, mantuvieron una estructura oculta para proteger al menos USD 14 millones, casi al mismo tiempo que la Justicia comenzaba a investigar los números de la empresa luego de una denuncia de la AFIP por presunto lavado de dinero.
Los documentos que aparecen en Pandora Papers dan cuenta de un secretismo pocas veces visto que incluyó nombres en clave para ocultar la identidad de los verdaderos dueños. Los Garbarino y García eran mencionados como “Escorpio”, “Airies” y “Fonfria” por los ejecutivos del estudio Trident Trust, un ardid más para resguardar decenas de millones de dólares y bienes.
La información se desprende de Pandora Papers, la nueva investigación global del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ), en la que participó Infobae junto a La Nación y elDiarioAR, basada en la filtración de casi 12 millones de documentos de más de una docena de proveedores de estudios offshore.
Entre finales de 2012 y mediados de 2013, los tres hombres clave de Garbarino mudaron sus fideicomisos de Bahamas a Islas Vírgenes Británicas. Según un intercambio de correos electrónicos de la firma Integritas Trust Company Limited, a los que accedió el equipo argentino de ICIJ, los tres argentinos eran identificados con esos apodos, aunque no identificaban en los mensajes a quién correspondía cada sobrenombre.
Por redacción.