Luego de una reunión entre el Gobierno y las principales compañías petroleras del mercado se pospuso el incremento del 1,45% en los precios de las naftas y el gasoil que se aplicaría a partir de este viernes.
La tarde del pasado jueves se llevó a cabo una reunión en el Ministerio de Energía y las petroleras, por la entrada en vigencia del renovado impuesto a los combustibles que dispuso la AFIP por la cual debería aumentar entre 6,5% la tasa al despacho de naftas y el gasoil y al dióxido de carbono con lo que se estima que los valores en los surtidores tendrían que subir alrededor de 1,45%.
Dichas empresas pactaron la detención del aumento, mientras se negocia un mecanismo para compensarlas al menos hasta julio. Las petroleras advierten que tras la resolución de la AFIP con el nuevo un impuesto, deben trasladar el impacto a los precios.
En diversos medios trascendió, el virtual "descongelamiento" de precios no atenta contra el acuerdo firmado entre Aranguren y las tres principales petroleras del país, YPF, Shell y Axion, ya que la letra chica del convenio contemplaba un incremento en las naftas y gasoil por la entrada en vigencia del exITC (Impuesto a la Transferencia de Combustibles) en el segundo semestre del año.
"A los efecto de contribuir a la estabilización en el corto plazo de precios de la economía y en miras del interés económico general, los Refinadores se comprometen a no realizar modificaciones de los netos de impuestos actualmente vigentes de sus combustibles durante los primeros dos meses del acuerdo (mayo y junio 2018)", reza el Punto 3 del acuerdo firmado el 8 de mayo pasado.